viernes, 13 de julio de 2012

Cómo aplicar recortes (de verdad)

Algunos consejos, gratis por hoy -espléndido que se siente uno- para aquellos que más los necesitan:
  1. Para los megamillonarios del mundo: vengan a España. Merece la pena evadir sus capitales y obligaciones fiscales desde esta tierra. Cuando llegue la cuenta al final de la cena, solo tienen que cantarle el 'cumpleaños feliz' al más bobo y seguro que paga. (Mientras la amnistía fiscal manda el mensaje que está coj bien evadir, Hacienda manda miles de citaciones para que el ciudadano raso demuestre que su casa es... suya: hay que ahorrar en desgravaciones y, oiga, que Bankia no se paga sola).
  2. Ciudadanos del mundo, indignados et al: solo quien es responsable merece libertad. Por eso se ha intervenido a España. ¿Quieren (queremos) libertad sin hacernos cargo de las consecuencias? (Banqueros, descuiden, esto no va por ustedes: sigan apostando al rojo, que la mesa siempre gana. Hagan juego hasta que su megacasino se vaya al infierno).
  3. Gobernantes, aprovechen para leer lo que la psicología recomienda para exprimir con más estilo a sus vasallos, hombre, que es que se está notando demasiado:

    "Un grupo de científicos diseñó un proyecto con el fin de explicar la capacidad de adaptación de los seres vivos (incluyendo la de los humanos) a los cambios provocados en las circunstancias de su entorno; particularmente en escenarios donde las condiciones de vida empeoraban para un sujeto.
    Para la investigación se iba a contar con dos pequeños pájaros criados en libertad, de la misma especie y parecidas características físicas, los cuales serían sometidos a sendos experimentos similares, si bien introduciendo para cada uno ciertas modificaciones.
    Los ensayos permitirían analizar la reacción, el comportamiento y metabolismo de cada ave a medida que fueran alterándose de manera controlada las condiciones ambientales a las que se iba a someter a cada una de ellas.
    Para el primer experimento se introdujo a uno de los pájaros en una urna con un sencillo mecanismo accionado por varios émbolos que permitía extraer gradualmente el aire del interior a lo largo de un período de tiempo específico.
    Según transcurrían los días, el oxígeno fue sacándose paulatinamente del interior de la urna. El pajarillo, en su esfuerzo de subsistencia, iba paralelamente habituándose a sobrevivir a las nuevas circunstancias, respirando una cada vez menor cantidad de un aire progresivamente más empobrecido.
    Pasadas varias semanas, aun cuando seguía decreciendo la cantidad de aire, el animal conseguía seguir adaptándose a las nuevas condiciones impuestas sobre él, reduciendo su actividad y necesidades, y, por consiguiente, el consumo de un aire que estaba agotándose.
    Tras detallar el extraordinario proceso de adaptación del ave, el grupo de científicos lo liberó, recuperándose el animal de su desventura en pocos días.
    Para concluir el experimento, se recurrió al segundo pájaro, al cual se confinó desde el principio dentro de la misma urna que el primero, si bien la cantidad de aire que contenía ésta era la misma que restaba al finalizar el experimento con el primer pájaro – un aire extremadamente enrarecido y escaso.
    Apenas unos minutos después de entrar en la urna, el segundo pájaro murió.
    ---------
    De la misma manera, un ser humano es capaz de habituarse prácticamente a cualquier entorno, a cualquier circunstancia – aunque ésta vaya degradándose poco a poco sin apenas notarlo.
    Dicho de otro modo, estamos programados para adaptarnos a 'lo que nos echen', si así lo decidimos.
    El problema aparece cuando la persona es capaz de seguir tragando circunstancias cada vez peores aunque impliquen un riesgo para la salud física o emocional del propio individuo."

    (Extraído de mi primer libro,
    'De Empleado a Millonario').

Vamos, no sean tan severos: nuestros gobernantes nuestros banqueros gobernantes de los bancos necesitan nuestro respaldo y compromiso.

Hagámosles llegar nuestro consejo.

Criaturitas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario