sábado, 11 de febrero de 2012

Un recordatorio

Ya ha pasado el ecuador desde que escribimos, en verano del año pasado, lo siguiente:

"... muchas personas... en verano 'cargan las pilas' para poder enfrentarse al nuevo año... quizás quiera considerar si lo que hace los once meses restantes le está drenando energía. Si es así, posiblemente sea este un buen período para reflexionar... y, atrévase, haga un pequeñísimo cambio en su vida que le acerque a una menor diferencia en su nivel de energía entre verano y no-verano cuando mire hacia atrás en julio de 2012."

Quedan apenas cinco meses para que llegue este verano. Que no nos distraiga este frío polar.

¿Ha iniciado ya ese cambio? ¿Quizás siga aguardando a una 'mejor ocasión'?

Esta, posiblemente, sea la mejor ocasión.

¿O sigue agotando sus baterías aguantando el tirón hasta que lleguen las vacaciones?

2 comentarios:

  1. AHHH el verano…Me gustaba ir a la playa, pero era horrible, desde el coche hasta la orilla…tenia que ir cargado de la sombrilla, las sillas, la mesa, la nevera, el bolso de las toallas….Mi mujer ya tenia bastante con coger de la mano a las niñas…En definitiva, llevaba una sobre carga.

    Muchos de nosotros seguimos llevando esa sobre carga durante el año, y con ese peso nos desmotiva de lo que hacemos o vamos a realizar.
    Tuve que eliminar ese sobre peso para poder disfrutar de mi día de playa, e hice una visión global de mi entorno, hasta que halle la solución, “reservar mesa en un chiringuito”, y desde entonces pude disfrutar de mi día de playa.

    Pero no todo en la vida es tan fácil, tenemos que buscar deshacernos de lo que nos pesa.
    Un saludo

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  2. Es curioso como, en ocasiones, nos vamos cargando con piedras y piedras y más piedras en la mochila (la de la responsabilidad, la del 'quedar bien', la del 'porque yo no voy a ser menos', la de 'es que los demás también lo hacen', la de...) hasta que, un día, habiendo cargado con esa penúltima piedra, nos damos cuenta que ya no podemos siquiera levantar la bendita mochila.

    Es entonces cuando algunos se quejarán de lo pesada que es la carga... mientras que otros harán ciertamente (y, posiblemente, certeramente) lo que apuntas: abrir la bolsa e ir soltando lastre para caminar más ligero.

    Gracias por compartir tu comentario y las lecciones que hay detrás!

    Un abrazo,

    G.

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