viernes, 17 de junio de 2011

Emprendedores, somos

Hace unas semanas estuve en un mercado medieval espectacular por su completitud y asombroso por su tamaño (unos cinco o seis campos de fútbol juntos). Había maestros de todas las disciplinas manuales posibles: carpintero, ebanista, herrero, orfebre, joyero, vidriero… Y en cada una de ellas, un pequeño taller para que los niños jugaran y experimentaran con el oficio de sus tatatatarabuelos.

Dos ideas. Una: nuestros e-niños se están perdiendo el desarrollo de talentos y enseñanzas del mundo ‘físico’ de los mayores (los pequeños aprenden solos a manejar una Wii o un iPhone en minutos). Dos: antes de la Revolución Industrial, una gran parte de nosotros trabajaba como autónomo. Empresario individual, vamos.

Ese gen sigue estando ahí.

No lo sigamos tapando con paladas de nóminas.


2 comentarios:

  1. "No lo sigamos tapando con paladas de nóminas". MUY BUENO

    Además estoy convencido de que los niños, y los mayores, prefieren lo físico que lo e-.

    Si me lo permites voy a recomendar un libro: ¿Porqué deseamos lo que deseamos?. Melinda Davis.

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  2. frases como "cometelo todo que yo a tu edad pasaba hambre" o " mi hijo ira a la universidad por que yo no pude", son vivencias adquiridas y a la vez traspasada a generaciones, para que no les ocurran lo mismo,es decir la carencia personal,pero yo pregunto ¿pasara hambre el niño? o ¿querra ir a la universidas?.
    creo que lo importante es ser sincero con uno mismo,y apostar por las ilusiones individuales.

    Un dato muy curioso,el 80% de los jovenes antes de sacar la seletividad no tiene decidido que hara con su vida ni que carrera eligira.

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